ni sol ni sombra/ ni agua ni tierra/ ni triste casa/ ni rica hacienda/ ni un espejito para mirarme/ amaré al aire (w. delgado)
domingo, 30 de marzo de 2014
En las palmas de mi mano
Isaías 49, 14-16
14. Pero dice Sión: «Yahveh me ha abandonado, el Señor me ha olvidado.»
15.- ¿Acaso olvida una mujer a su niño de pecho, sin compadecerse del hijo de sus entrañas? Pues aunque ésas llegasen a olvidar, yo no te olvido.
16.Míralo, en las palmas de mis manos te tengo tatuada, tus muros están ante mí perpetuamente.
_______________
Texto tomado de aquí.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario